En las canchas de una universidad en Estados Unidos, resalta una figura de pelaje negro y ojos brillantes. No es una estrella deportiva emergente, sino Cori, una perra Labrador Retriever que ha revolucionado el mundo del deporte universitario con su inigualable labor como asistente de los equipos de fútbol americano y béisbol.
Más que una Simple Mascota: Cori, la Asistente Esencial
Mientras muchos asistentes cargan con pesados equipos y se encargan de la logística, Cori se desliza entre ellos con una misión clara: asegurarse de que la indumentaria esté en su lugar y de recoger con diligencia los palos de madera tras cada hit. Sin embargo, sus tareas no terminan ahí. Cori tiene la habilidad única de motivar a jugadores y entrenadores, infundiendo un ambiente de camaradería y entusiasmo en cada juego.
El Poder Sanador de una Cola Meneante
Más allá de sus tareas prácticas, Cori tiene un impacto profundo en el bienestar emocional de los atletas. Se ha convertido en el motor que eleva la moral en momentos cruciales, siendo una constante fuente de aliento y cariño.
Uno de los jugadores, en particular, ha desarrollado un vínculo especial con Cori. Aunque no se han revelado muchos detalles, es evidente que esta relación va más allá del campo. La presencia constante y cariñosa de Cori ha permitido que este jugador alcance su mejor versión como atleta.
Lisa Tell: La Veterinaria Detrás de la Sensación Canina
Aunque Cori brilla con luz propia, no podemos olvidar a la mujer detrás de esta maravillosa perra. Lisa Tell, su propietaria, conversó con el canal de televisión local KCRA 3 de NBC sobre su sorprendente mascota.
Admitiendo no saber mucho sobre fútbol americano, Lisa, que trabaja como veterinaria, expresó su alegría por cómo su querida Cori se ha convertido en una parte esencial del equipo. “No sé mucho del deporte, pero ver a mi Cori allí, haciendo lo que ama y ayudando a tantos, me llena de orgullo”, confesó Lisa.
Un Ritual de Fin de Semana
Como cualquier aficionado apasionado, Cori y Lisa no se pierden un solo partido. Cada sábado, se aseguran de estar presentes, apoyando y animando desde las gradas. Lisa recuerda con cariño cómo sus hijos se han maravillado con Cori, enorgulleciéndose de su increíble labor en el campo y fuera de él.
No cabe duda de que Cori ha dejado una huella indeleble en el corazón de todos los que han tenido la suerte de conocerla. Con su dedicación, cariño y habilidades inigualables, esta Labrador Retriever ha demostrado que a veces, cuatro patas pueden hacer una diferencia más grande que cualquier par de zapatos deportivos.
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